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Sumérjase en un mundo de historia y arte, explorando las calles adoquinadas y las antiguas plazas de las ciudades de la Toscana. Con su conductor privado, salga de Florencia hacia los típicos paisajes toscanos, inmortalizados en famosas películas de Hollywood. Visite Siena y sumérjase en la historia medieval, comenzando en la distintiva Piazza del Campo, con forma de concha, famosa por el Palio, la carrera de caballos en la que todavía compiten los barrios "contrade" de la ciudad dos veces al año. Admire el Palazzo Pubblico, con su arquitectura gótica cívica; la Torre del Mangia; y la Catedral, una de las mayores expresiones artísticas de la Edad Media. Salida de nuevo hacia Chianti y el pueblo fortificado de Monteriggioni, con sus murallas de once torres. Deleite su paladar en una finca rural, disfrutando de un almuerzo con productos típicos y una selección de vinos locales. La siguiente parada es San Gimignano, donde podrás pasear por el centro histórico para descubrir la Piazza della Cisterna, la Collegiata di Santa Maria Assunta, el Palazzo del Podestà y la Iglesia de Sant'Agostino. Finalmente, dirígete a Pisa y su Piazza dei Miracoli, donde se encuentran la Torre Inclinada, el Baptisterio, la Catedral y el Cementerio Monumental: bellos ejemplos de arquitectura románica de los siglos XII y XIII. Mientras deambulas por un laberinto de emociones, te esperan maravillas en cada esquina.
Florencia es la síntesis del Renacimiento. Rica en monumentos, como Santa Maria Novella, el Palazzo Vecchio o la Galería de los Uffizi. Lugares que acogieron, entre otros, el genio de Dante, Leonardo, Miguel Ángel y Botticelli, adornados con una increíble cantidad de obras de arte. Florencia contiene lugares suspendidos en el tiempo, como el Ponte Vecchio, donde las tiendas de orfebrería continúan una tradición que se remonta a la Edad Media. Revela itinerarios que combinan naturaleza y paisaje, dentro o en los bordes de las murallas de la ciudad: los Jardines de Bóboli, delicia de la dinastía Medici, o la colina de San Miniato desde donde se puede observar toda la ciudad. La historia de Florencia pasa también por sus talleres artesanales, algunos de los cuales se han convertido en marcas mundialmente famosas, y sus restaurantes tradicionales en los que deleitar el paladar y descubrir las excelencias enológicas de los súper toscanos. En resumen, Florencia es un cofre del tesoro lleno de infinitos tesoros, todos por descubrir.
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