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Atravesando veinte siglos de historia y tradiciones, en una etapa de platos milenarios por descubrir. La pizza, símbolo de la cocina italiana en el mundo, nació en Nápoles, pero la pastiera, la Sfogliatelle y la Baba, entre otras, también deleitan el paladar. Un recorrido guiado a pie, para saborear la esencia de la ciudad descubriendo los secretos de sus platos. Empiece desde el Duomo degustando el tarallo napolitano con pimiento y almendras, o la tortilla de pasta, la reina de la comida callejera napolitana. Continúe por el barrio de San Gregorio Armeno para conocer el arte del belén napolitano y llegar a la Piazza del Gesù Nuovo. Desde aquí toma Via Toledo, columna vertebral del centro histórico y prueba la pizza tradicional, la frita o la Cuoppo. Explore las tiendas y puestos a lo largo de la Galleria Umberto I y termine con un babà o una Sfogliatella, obviamente acompañados de un espresso napolitano. Captar en cada bocado la armonía que ha hecho historia.
Nápoles es una ciudad que captura los sentidos y sorprende en cada rincón. Abrazada por el mar y dominada por el majestuoso Vesubio, se nutre de los contrastes entre historia milenaria y vitalidad moderna. El centro histórico, declarado patrimonio de la humanidad por la UNESCO, es un laberinto de animadas callejuelas donde el arte, la música y los sabores se mezclan en una atmósfera única. Desde el imponente encanto del Castillo Angioino hasta las leyendas del Castel dell'Ovo, pasando por el corazón palpitante de la Catedral de San Gennaro, Nápoles seduce con su espíritu rebelde y su conmovedora belleza. Y luego está la comida: la pizza, una auténtica poesía de sabores.
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